Pitonisa

Pocas veces en la vida uno sabe, con total certeza, lo que va a pasar en un futuro. Yo, hoy, sé lo que pasará mañana. Lo sé... aunque ojálá me equivoque.

Acabo de hablar con ella. El domingo se marcha a Londres. Creo, o mejor dicho, creía que era la decisión más acertada que podría tomar, de esas decisiones que marcan el destino de una vida, el camino que finalmente llevarás. Ahora no estoy tan segura. Las personas nunca cambian.

Solo le queda esta tarde y mañana para despedirse de la familia. En despedirse de sus amigos ha empleado dos días, incluso no ha dormido en casa. Apuesto a que, a pesar de que me ha insistido en que "cómo no voy a ir" y "te crees que tengo 10 años, no hace falta que me lo digas porque yo ya lo sé"... a pesar de que se cree tan mayor y tan madura, sé que es una irresponsable y que, por H o por B, no se despedirá de mis abuelos, o quizás de los maternos sí, pero no de la abuela María... no sé porqué, pero lo sé.

Las personas no cambian... aunque ojalá me equivoque y, la personita maravillosa, tierna, dulce, activa, dicharachera, graciosa, la que ponía empeño en todo lo que hacía... la personita que era mi hermana, vuelva a ella gracias a esta experiencia que es, además de independizarte del seno de tus padres, buscar un trabajo y aprender a vivir sola en una casa, hacerlo en un país que no es el tuyo. Es todo un reto, y lo que más deseo es que lo supere, y con creces.

Aunque intente negarlo y aunque me cueste, en el fondo la quiero... cómo se puede no querer a tu única hermana... Cómo podría no querer a mi enana, a mi dancing queen.

viernes, enero 30, 2009 |

1 comentarios

Blogger Billy dijo...

Bonito post, aunque triste en su contenido. Ánimo que siempre estará a tiempo de volverse si no le va bien... a pesar de todo yo pienso que se pueden sacar más cosas positivas de una experiencia así que negativas.

Por cierto, gracias por escribir en mi blog... Un besos sister

Cuando: 10:24 a. m., febrero 05, 2009

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